El Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat realiza trabajos de preservación y renaturalización de los pinares y lagunas de su entorno en los terrenos que adquirió.
Aena apoya a La Cursa de RAC1, una iniciativa en la que los participantes siempre han mostrado su compromiso con la sostenibilidad, compartiendo unos valores que el gestor aeroportuario también tiene como objetivos principales.
Aena está comprometida con la preservación de los entornos naturales de sus aeropuertos. En Cataluña, el aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat se encuentra en una particular localización que le confiere un valor ambiental especial. Este privilegiado enclave lo configura como un aeropuerto que protege estos valores naturales gracias a una convivencia sostenible entre los objetivos ecológicos del entorno y los de una adecuada gestión aeroportuaria.
En la zona costera del Prat de Llobregat que separa el Aeropuerto del mar encontramos la Isla, una laguna artificial construida por Aena para incrementar las zonas húmedas del espacio protegido, renaturalizando las zonas degradadas que antes ocupaba un camping, y por crear un corredor natural entre la desembocadura del río Llobregat y el Pineda de Can Camins, un espacio protegido por su riqueza arbustiva y, especialmente, por las comunidades de orquídeas autóctonas repartidas entre la masa arbórea.
Más al sur se encuentra la laguna de La Roberta, construida también por Aena para incrementar las zonas húmedas en el frente litoral. Resulta un paraje precioso para las aves acuáticas de los entornos aeroportuarios, que conviven con las demás especies presentes en la zona inundable de su alrededor, renaturalizada con una plantación de especies propias de los hábitats deltaicos.
En el término municipal de Viladecans se encuentran la laguna del Remolar, que se adentra hacia el interior a lo largo del canal de La Vidaleta, y los terrenos húmedos de Filipinas. Este espacio natural se extiende hacia el sur con una franja de pinos que siguen la costa con el Pinar de Filipinas y el Pinar de la Murtra, donde anteriormente se situaban instalaciones vacacionales y que fueron adquiridas por Aena para fomentar los espacios naturales.
Para favorecer la convivencia entre la actividad aeroportuaria y estos valiosos espacios naturales que se extienden en más de 100 ha, Aena realiza trabajos de conservación y renaturalización de sus entornos en los terrenos adquiridos. En las masas de pinar se desarrollan actuaciones de selvicultura consistentes, entre otras, en la eliminación de especies invasoras introducidas por los antiguos resortes turísticos, o en la instalación de cajas nido. Para garantizar la seguridad de los espacios se realizan también desbroces perimetrales antiincendios, se desembarazan los caminos y se crean senderos.
Seguint aquesta línia d’actuacions de millora ecològica els serveis ambientals de l’aeroport inspeccionen i controlen la presència de fauna exòtica que pugui amenaçar a les espècies autòctones. Aquest control de fauna es realitza també a les zones aquàtiques per evitar la proliferació de carpes o tortugues americanes.
En l’àmbit hidrològic, l’Aeroport Josep Tarradellas Barcelona-El Prat manté en correcte estat els canals de desguàs al Delta i a la costa. Així mateix, realitza actuacions tant d’extracció d’aigua en pous costaners per combatre la intrusió salina als aqüífers, com de transvasament hídric dels canals de l’aeroport cap a les llacunes amb l’objectiu de mantenir uns nivells òptims les seves làmines d’aigua.
Aquests espais naturals poden gaudir-se en zones obertes al públic des d’on són visibles les pinedes i els aiguamolls, així com les espècies animals que els han convertit en els seus hàbitats de residència.
Voleu conèixer millor els espais naturals de l’entorn de l’Aeroport?